Creo que no conozco a nadie que no le guste observar un globo terraqueo. Es una especie de atracción que sentimos quizá por verlo en el colegio como la solución a muchos de nuestros exámenes y tan difícil de aprender.
A mi me encantaba imaginar como sería verlo desde el espacio o los viajes y lugares que haría.
Hoy, os mostraré formas de decorarlos y de hacerlos un poco más actuales, solidarios o imaginativos.
Mi favorito es este.
Simplemente con unas imágenes y un poco de cola está hecho. Yo lo craquelaría después para darle más sensación de antiguo y de real. ¿A quién no le gustaría visitar este mundo?
Para craquelarlo tres capas de cola blanca y después otras tres de goma arábiga (la mejor Pelikan). Después un poco de ayuda con el secador de pelo y un acabado con betún de judea aplicado con un trapo.
Otras formas de decorarlo de una forma parecida es...
y para los más solidarios...