Mira el resultado:

Este era el aspecto original:

Estaba bastante sucio y desgastado.
Lo primero que hicieron fue desmontar los tiradores con cuidado con unos alicates para no romperlos. Los reutilizaron tras pintarlos.


Los quitaron todos, todos, todos... y limpiaron toda la superficie.

Luego pintaron con spray de metal en amarillo.

Y los tiradores en blanco.

Despues, cortaron y pegaron papeles sobre los cajones. Importante: que coincida el dibujo entre los cajones.

Para pegarlos; una capa de cola, una de papel, y otra de cola...

Y así hasta el final.
Para finalizar, hay que volver a colocar los tiradores.



Y esta idea es de aquí.